Vertel uw vrienden over dit artikel:
El Intruso
Vicente Blasco Ibanez
Besteld in een afgelegen magazijn
Ook verkrijgbaar als:
-
Paperback BookSpanish edition(2018) € 15,99
- Paperback Book (2016) € 17,99
- Paperback Book (2016) € 18,99
- Paperback Book (2018) € 18,99
- Paperback Book (2017) € 19,49
- Paperback Book (2013) € 19,99
- Paperback Book (2016) € 19,99
- Paperback Book (2018) € 19,99
- Paperback Book (2017) € 19,99
- Paperback Book (2018) € 19,99
-
Paperback BookSpanish edition(2018) € 20,49
- Paperback Book (2018) € 20,49
- Paperback Book (2018) € 22,49
- Paperback Book (2018) € 22,49
-
Paperback BookSpanish edition(2012) € 23,49
-
Paperback BookSpanish edition(2024) € 23,49
- Paperback Book (2017) € 23,99
- Paperback Book (2014) € 23,99
-
Paperback BookSpanish edition(2013) € 42,99
- Paperback Book (2021) € 53,49
-
Hardcover BookSpanish edition(2013) € 59,99
- Paperback Book (2022) € 66,99
- Hardcover Book (2021) € 71,49
- Hardcover Book (2022) € 84,99
El Intruso
Vicente Blasco Ibanez
Comenzaba á clarear el día cuando despertó el doctor Aresti, sintiéndose empujado en un hombro. Lo primero que vió fué el rostro de manzana seca, verdoso y arrugado de Kataliñ, su ama de llaves, y los dos cuernos del pañuelo que llevaba la vieja arrollado á las sienes. -Don Luis... despierte. Muerto hay en el camino de Ortuella. El jues que vaya. Comenzó á vestirse el doctor, después de largos desperezos y una rebusca lenta de sus ropas, entre los libros y revistas que, desbordándose de los estantes de la inmediata habitación, se extendían por su dormitorio de hombre solo. Dos médicos tenía á sus órdenes en el hospital de Gallarta, pero aquel día estaban ausentes: el uno en Bilbao con licencia; el otro en Galdames desde la noche anterior, para curar á varios mineros heridos por una explosión de dinamita. Kataliñ le ayudó á ponerse el recio gabán, y abrió la puerta de la calle mientras el doctor se calaba la boina y requería su cachaba, grueso cayado con contera de lanza, que le acompañaba siempre en sus visitas á las minas. -Oye, Kataliñ-dijo al trasponer la puerta.-¿Sabes quién es el muerto? -El Maestrico disen. El que enseñaba por la noche el abesedario á los pinches y era novio de esa que llaman La Charanga. ¡Cómo está Gallarta, Señor Dios! Ya se conoce, pues: la iglesia siempre vasía. -Lo de siempre-murmuró el médico.-El crimen pasional. A estos bárbaros no les basta con vivir rabiando y se matan por la mujer. Aresti andaba ya, calle abajo, cuando la vieja le llamó desde la puerta. -Don Luis, vuelva pronto. No olvide que hoy es San José y que le esperan en Bilbao. No haga á su primo una de las suyas. Aresti notó la entonación de respeto con que hablaba la vieja de aquel primo que le había invitado á comer por ser sus días. En todo el distrito minero nadie hablaba de él sin subrayar el nombre con una admiración casi religiosa. Hasta los que vociferaban contra su riqueza y poderío, le temían como á una fuerza omnipotente. El
Media | Boeken Paperback Book (Boek met zachte kaft en gelijmde rug) |
Vrijgegeven | 18 januari 2018 |
ISBN13 | 9781981196395 |
Uitgevers | Createspace Independent Publishing Platf |
Pagina's | 348 |
Afmetingen | 152 × 229 × 18 mm · 467 g |
Taal en grammatica | Spaans |
Meer door Vicente Blasco Ibanez
Meer uit deze serie
Bekijk alles van Vicente Blasco Ibanez ( bijv. Paperback Book , Hardcover Book , Book en CD )